Debo de vivir equilibrado

Día 39

En este capítulo el autor habla de que debemos de vivir de una forma equilibrada. Debemos equilibrar nuestra vida entre los 5 puntos del gran mandamiento y la gran comisión.


  1. Ama a Dios con todo tu corazón: Fuiste creado para agradar a Dios (adoración)

  2. Ama a tu prójimo como a ti mismo: Fuiste creado para servir a Dios (ministerio)

  3. Ve y haz discípulos: Fuiste creado para una misión (evangelismo)

  4. Bautizándolos en…: Fuiste creado para vivir en la familia de Dios (compañerismo)

  5. Enseñándolos a hacer todas las cosas…: Fuiste creado para ser como Cristo (discipulado)

El autor propone cuatro cosas que debemos de hacer después de leer este libro para mantener una vida equilibrada


Habla de esto con tu compañero espiritual o grupo pequeño. Dice que debemos de compartir con los demás hermanos nuestro crecimiento con el fin de animarnos y fortalecernos para seguir adelante. Involucrando a otros puede enriquecer las lecciones que Dios nos está enseñando.


Evaluar tu vida espiritual con regularidad. Debemos tomar tiempo para examinar nuestras vidas y ver cómo estamos. Debemos pedirle a Dios que nos muestra la verdad por medio de su luz.


Escribe tus progresos en un diario. Yo creo que esto es parecido a la libreta de devocionales. Donde podemos escribir las cosas que Dios nos va enseñando. No solamente debemos de escribir las cosas agradables sino como David, que escribió sus dudas, sus angustias y hasta sus quejas.


Enseña a otros. Dice el auto que una forma de aprender más de Dios es enseñando a otros lo que has aprendido. De alguna forma te ayuda a repasar las lecciones que has aprendido al volver a recordarlo para enseñarlo. Esto es parte del discipulado, y si nosotros no reproducimos que lo nuestro discipulado nos enseñó, entonces está quedando falto nuestro discipulado. Debemos de seguir con el proceso de discipulado.


Pregunta para considerar: ¿Con cuál de las cuatro actividades puedo comenzar para seguir y equilibrar los cinco propósitos de Dios para mi vida?


Mi opinión: De los cuatro puntos, llevo a cabo 3, pero no con toda conciencia. Yo creo que sería hacerlo con más significado y comenzar a hacer el punto 4, que es enseñar a los demás.

La gran comisión es mi comisión

Día 38
En este capítulo el autor habla de nuestro cumplimiento de la gran comisión. Dice que debemos de planear una experiencia de trabajo misionero fuera del país. O podemos ser cristianos de clase mundial o podemos ser cristianos mundanos. No debemos enfocarnos en nosotros mismo sino también en los demás.
Deja de pensar en ti mismo y piensa en otros. Por naturaleza nosotros pensamos en nuestro propio beneficio y bien estar, pero la biblia nos dice que también debemos pensar en el bien de otros. Necesitamos pedirle a Dios que nos ayude a pensar en las necesidades de los demás y especialmente de aquellos que no conocen de Cristo.
Cambia tu perspectiva local a global. El autor describe la forma en que todo se ha vuelto más a nuestro alcance y que la mayoría de las cosas está a nuestro alcance, como es viajar a diferentes países y continentes, comunicarnos con personas en diferentes partes del mundo. Debemos orar por países específicos. Para pensar global, podemos pensar en un proyecto misionero breve a otro país.
Fórjate una perspectiva eterna. Debemos ver las cosas que perduran para la eternidad y dejar de pensar en las cosas pasajeras y que no tiene valor eterno. Muchas de las cosas en las que nosotros gastamos nuestras energías no tendrán importancia en un año y por consiguiente mucho menos en la eternidad. No cambies tu vida por cosas temporales.
Deja las excusas y piensa en formas creativas para cumplir tu comisión. Yo creo que nos sobran las excusas que usamos para no trabajar para el Señor. Nosotros mismo somos nuestro mayor obstáculo. Creo que esperamos que Dios haga un milagro en nuestra vida o que nos controle como marionetas para hacer su voluntad, pero la realidad es que nosotros debemos de dejar de excusas y ponernos a trabajar para cumplir con la gran comisión.
Pregunta para considerar: ¿Qué paso puedo dar para enrolarme en una experiencia misionera breve el próximo año?
Mi opinión: Comenzar a ahorrar dinero para los gastos. Hablar con Luis para acompañarlo en su siguiente viaje misionero.

Comparte el mensaje de tu vida

Día 37

En este capítulo, el autor habla de que una forma de cumplir nuestra misión es compartiendo el mensaje de nuestra vida. Podemos compartir a Dios por medio de nuestras experiencias personales. Podemos compartir nuestro testimonio, las lecciones de vida, pasiones divinas y las buenas nuevas. El autor expone estos cuatro puntos.

Tu mensaje de vida incluye tu testimonio. Mi testimonio es la historia de cómo Cristo marcó una diferencia en mi vida. A veces las personas que no conocen a Cristo se sienten más a gusto escuchando la historia de una persona que escuchando el mensaje de un pastor. Las personas pueden entender más de una historia que principios y versículos bíblicos. Y es fácil para nosotros relatar nuestra propia historia, pero para ser más hábiles en relatar nuestro testimonio el autor sugiere que lo preparemos por escrito y memoricemos los puntos principales. Sugiere que lo dividamos de la siguiente manera:
  1. Cómo era mi vida antes de conocer a Jesús.
  2. Cómo supe que necesitaba a Jesús.
  3. Cómo rendí mi vida a Jesús.
  4. La diferencia que Jesús ha hecho en mi vida.

Tu mensaje incluye tus lecciones de vida. Otro parte del nuestro mensaje son todas las verdades que Dios nos ha enseñado a través de la relaciones, los problemas, las tentaciones y otros aspectos de la vida. Es muy sabio aprender de nuestros errores pero aún más sabio aprender de las lecciones y errores de los demás. Así que el autor recomiendo hacer una lista de las lecciones que hemos aprendido para tenerlos consientes cuando compartimos las lecciones de vida que hemos aprendido.

Tu mensaje incluye expresar tus pasiones divina. Dios nos da a cada uno de nosotros si pasión por las personas. Dios es apasionado por todos, y si todos trabajaran de acuerdo con la pasión que Dios nos da, entonces todos seremos afectados por la pasión divina de alguien. Debemos preguntarle a Dios cual es la pasión que nos ha dado para trabajar con esas personas y compartirles nuestro mensaje.

Tu mensaje incluye las buenas nuevas. Las buenas nuevas son de que Dios nos dio salvación a cada uno de nosotros promedio de la fe y solamente por la fe. Gracias a Dios podemos estar con Él en la eternidad si tan solo creyéramos en Él. Este es el mensaje de vida. Es la que tenemos que compartir a los demás. Este es el quito propósito de este libro, y es el único que se puede llevar a cabo en esta tierra, lo demás los continuaremos en el cielo con Dios. Así que debemos aprovechar bien nuestro tiempo en la tierra. La única forma que podemos llevar a cabo este propósito es compartiendo el amor que Dios tiene para los que aún no creen.

Pregunta para considerar: Reflexionando en mi historia persona, ¿a quién quiere Dios que se la cuente?

Mi opinión: *******.

Fui hecho para una misión

Día 36

Este capítulo es el primer capítulo del quinto y último propósito de este libro que es, “Fuiste hecho para una misión”. El autor dice que cada uno de nosotros tenemos ministerios y una misma misión. El ministerio es el trabajo que se hace con los que ya son creyentes o sea los de la iglesia, y la misión es con las personas que aún no creen, o en otras palabras los del mundo. Nuestra misión es compartida y específica. El autor expone 6 razones por lo cual nuestra misión es importante.

Tu misión es una continuación de la misión de Jesús en la tierra. Como seguidores de Cristo debemos de terminar lo que Él comenzó. La Gran Comisión fue asignada a cada seguidor de Cristo y no a los pastores o ministros. Dice en Ezequiel 3:18 que Dios nos pedirá cuentas de los no cristianos a quienes pudimos compartir de Cristo.

Tu misión es un privilegio maravilloso. Nuestra misión involucra dos grandes privilegios, trabajar con Dios y representarlo. Estamos colaborando en la construcción de Su Reino.

Decirle a otros cómo pueden obtener la vida eterna es lo mejor que puedes hacer por ellos. Su tu vecino tiene cáncer o SIDA y sabes cuál es la cura, sería un crimen que retuvieras esa información que le salvaría la vida. Así es también con el perdón y vida eterna que da Jesús. Sin Cristo están perdidos y listos para la separación eterna de Dios. Todos necesitamos a Jesús ya que es el único que puede salvar.

Tu misión tiene un significado eterno. Esto impactará el destino eterno de otras personas, así que es más importante que cualquier trabajo, logro o meta que encontrarás durante tu vida en la tierra.

Tu misión da significado a tu vida. Si fallas en cumplir la misión que Dios te asignó en la tierra, entonces has desperdiciado la vida que Dios te Dios. Si sólo una persona va al cielo por tu causa, tu vida habrá hecho una diferencia por la eternidad.

La conclusión del tiempo de Dios en la historia está vinculada con la terminación de nuestra comisión. Cuando toda la tierra ha escuchado el evangelio, es cuando Jesús vendrá por segunda vez. Nuestra misión es lo que detonará el fin del mundo.

Dios quiere usar nuestras vidas para cumplir su misión. Nosotros debemos rendir nuestras vidas y planes en las manos de Dios para que los use en su obra. Que se haga su voluntad y no la nuestra. Siempre debemos buscar uno más para Cristo.

Pregunta para considerar: ¿Qué temores me detienen para cumplir la misión de Dios y poder terminarla? ¿Qué me detiene para hablarles a otros de las buenas nuevas?

Mi opinión: Yo creo que el rechazo.

El poder de Dios en nuestras debilidades

Día 35

Este capítulo trata de que a Dios le agrada trabajar con los débiles e imperfectos. Dios usa a los débiles para mostrar su poder a los poderosos. No importa cuáles son nuestros defectos o debilidades, a Dios le agrada usarnos para su gloria. El autor dice que Dios permitió deliberadamente que tuviéramos estas debilidades para poder mostrar su poder a través de ellas.

Debemos reconocer nuestra debilidad. Debemos de reconocer que somos imperfectos y que tenemos debilidades. En vez de negarlos o de fingir que no es cierto, debemos aceptarlos y ser honestos con nosotros mismos. Lo que necesitamos para vivir saludablemente es saber quién es Dios y saber quiénes somos nosotros.

Alégrate con tus debilidades. Aunque suene contradictorio debemos de alegrarnos de nuestras debilidades porque es una expresión de fe en la bondad de Dios. La debilidad hace que depender de Dios. Previene la arrogancia. Mantiene tu humildad. Nuestras debilidades también nos animan al compañerismo entre los creyentes. La mayoría de todas nuestras debilidades aumenta nuestra sensibilidad relacional y ministerial. Dios quiere tomar tu debilidad más grande y transformarla.

Comparte sinceramente tus debilidades. Pablo a través de sus cartas expresó con sinceridad sus fallas, sentimientos, frustraciones y temores. Es normal que al compartir, uno se vuelve vulnerable y puede llegar a ser rechazado pero si no somos rechazados los beneficios valen la pena. No ayuda a liberarnos emocionalmente, aliviar el estrés, desactiva nuestros temores y es el primero paso para la libertad. Mientras más sincero seas más recibirás la gracia de Dios. Si la gente solo ve fortalezas en nosotros eso puede ser motivo de desaliento en esa persona. En algún punto en la vida tendremos que decidir si queremos impresionar a las personas o influenciar. La calidad esencial para el liderazgo no es la perfección, sino la credibilidad. Las personas deben confiar en ti o no te seguirán.

Gloríate en tus debilidades. Dios usa a los débiles, y el tener debilidades significa que Dios los usará para mostrar su poder. Porque si no tenemos debilidades, Dios podría transformar una fortaleza en una debilidad para entonces poder usarnos. Así que debemos de gloriarnos en las debilidades que si tenemos.

Pregunta para considerar: ¿Estoy limitando el poder de Dios en mi vida tratando de ocultar mis debilidades? ¿En qué necesito ser honesto de manera que pueda ayudar a otros?

Mi opinión: Lo más seguro es que si. Quizá todavía considero vergonzoso mis debilidades te tengo temor de ser rechazado por ellos. Pues mostrar que yo también soy solo humano con debilidades también.

Mentalidad de siervo

Día 34

En este capítulo el autor continúa sobre el tema de ser siervo. Específicamente describe la actitud que debe tener el siervo a la hora de servir. Dice que a Dios le interesa más el por qué hacemos las cosas que en lo que hacemos. Las actitudes cuentan más que los hechos. El autor propone 5 actitudes que debe tener el siervo de Dios al servir.

Los siervos piensan más en otros que en sí mismo. Los siervos actúan sin pensar en el beneficio de uno mismo. El autor dice que esto es “perder su vida”. Es dejar de enfocarnos en nuestras propias vidas para servir a otros. A veces servimos a otros pero con un fin distinto y egoísta, como es para agradar a otra persona, ser admirado y glorificado por otras personas, o para lograr nuestras propias metas. Eso es ser egoísta y servir enfocándose en uno mismo. ¿Cómo reaccionas cuando eres mandado por alguien o tratado como un inferior?

Los siervos piensan como mayordomos, no como dueños. No podemos servir a dos señores. Para ser siervo no podemos servir al dinero, sino solamente a Dios. Cuando servimos al dinero, nos volvemos esclavos del dinero, pero cuando servimos a Dios, el dinero nos sirve a nosotros. Los siervos del Señor siempre están conscientes del ministerio y no del dinero. Podemos ser edificadores del Reino o edificadores de riquezas. Seamos de los primeros.

Los siervos piensan en su trabajo, no en lo que otros hacen. No comparan, critican ni compiten con otros siervos o ministerios. No lo hacen porque todos están el mismo equipo. En lugar de gastar energía en criticando o comparando, mejor lo usan para seguir sirviendo a Dios. La biblia dice que no nos toca criticar el siervo de otro, sino eso le toca a su amo. De igual forma no nos toca defendernos cuando somos criticados por nuestro servicios, dejemos eso al Señor también. Tu servicio por Cristo nunca es considerado como pérdida aunque otros lo digan.

Los siervos basan su identidad en Cristo. Cuando uno tiene la certeza de quien es en Cristo, puede servir a Dios sin inseguridades. Cuando en entiendes la realidad del asunto, todos los obstáculos que uno mismo pones se vuelven vanas y nos podemos enfocar en lo que realmente es importante. Cuando vemos el mundo con los ojos de Cristo nos damos cuenta de lo que realmente vale la pena.

Los siervos piensan en el ministerio como una oportunidad, no como una obligación. Disfrutan ayudando a la gente, supliendo necesidades y realizando su ministerio. Saben que Dios les ha prometido recomenzarlos. Saben que servir es el mejor eso que pueden darle a su vida.

Pregunta para considerar: ¿Me preocupo más por ser servido que por servir a otros?

Opinión: Yo creo que no. De alguna forma siento que no estoy sirviendo pero tampoco busco que me sirven a mí.

Servimos a Dios sirviendo a los demás

Día 33

En este capítulo el autor nos enseña la importancia de servir a los demás. Dice que hoy en día la grandeza para una persona se puede medir en el número de personas que tiene a su servicio. Mientras más gente lo sirve, más grande es. Pero Jesús vino a decir que es al revés en el Reino de Dios, lo que más grandes son los que sirven a los demás. Tu FORMA revela tu ministerio pero tu corazón de siervo muestra tu madurez.

Los siervos verdaderos siempre están disponibles para servir. Un verdadero siervo hace lo que se necesita aunque no les convenga. Es darle el derecho a Dios de controlar tu horario y permitir que lo interrumpa en cualquier momento que lo necesite, y no se frustran porque lo ven como una cita divina para el ministerio y son felices por la oportunidad de practicar el servicio.

Los siervos verdaderos prestan atención a las necesidades. Los siervos siempre están mirando las maneras de ayudar a otros. Cuando Dios pone a alguien en necesidad frente a ti, te está dando la oportunidad de crecer en el servicio. Los siervos aprovechan esas oportunidades y sirven.

Los siervos verdaderos hacen lo mejor con lo que tienen. Lo siervos no tienen excusas, ni postergan ni esperan mejores circunstancias. Uno no tiene que ser perfecto para servir, sin más bien es la forma en que uno aprende a ser bueno en servir. Así que debemos deshacernos de excusas y aprender a servir mejor a través de la práctica.

Los siervos verdaderos cumplen sus tareas con la misma dedicación. No importa la cantidad de servicio sino la calidad. Todo lo hacen con humildad y como sirviendo al Señor. No buscan grandes tareas porque todos son iguales para ellos.

Los siervos verdaderos son fieles a sus ministerios. Los siervos terminan sus tareas, cumplen con sus responsabilidades, mantienen sus promesas y completan sus compromisos. Son personas en los cuales se puede confiar y contar.

Los siervos verdaderos mantienen un bajo perfil. No buscan la vanagloria de las personas sin la gloria de Dios en lo secreto. No sirven al ojo. La autopromoción y el servicio no se mezclan. No buscan la aprobación de los hombres sino de Dios.

Pregunta para considerar: ¿Cuál de las 6 características de los siervos verdaderos me desafían más?

Mi opinión: El estar siempre disponibles a Servir. No se si Dios quiere que falta a mi trabajo o responsabilidades para aprovechar una oportunidad para servir.

Usa lo que Dios te ha dado

Día 32

En este capítulo es autor habla de cómo podemos poner en práctica la FORMA que Dios nos ha dado. Dios merece lo mejor de nosotros. Dios quiere que pongamos en práctica todo lo que Él nos dio para Su propósito. Quiere que nos enfoquemos y usemos los talentos que nos ha dado. El autor propone 3 puntos para llevar acabo esto.

Descubre tu FORMA. Recordando que FORMA significa formación espiritual, oportunidades de mi corazón (deseos, pasiones, interés), recursos (talentos), mi personalidad y antecedentes. Dice que debemos de evaluar nuestros dones y recursos. Para hacer esto necesitamos preguntarles a otras personas para que nos confirmen nuestros dones. También debemos de conocer nuestros dones a través de la práctica. Pongámonos a trabajar en diferentes áreas para ver en cual nos desarrollamos más. Luego debemos de considerar nuestras oportunidades y personalidad. Y por ultimo examinar nuestros antecedentes y extraer las lecciones que aprendimos.

Acepta y disfruta tu FORMA. Debemos de entender y creer que Dios nos creó de la manera que somos a propósito. Debemos gozarnos con lo que Dios no ha dado y ponerlo en práctica, solo así podemos ser completamente plenos. Si nosotros estamos haciendo lo que Dios quiere que hagamos, que importe todo lo demás. No debemos de compararnos con los ministerios de los demás ni tampoco debemos de conformarnos con los estándares de nuestra iglesia. No debemos de hacer caso a los demás, sino solamente a Dios.

Mantente desarrollando tu FORMA. La parábola de los talentos nos enseña que Dios da más a los que trabajen sus talentos y quita de los que no trabajan sus talentos. Debemos de esforzarnos de trabajar los talentos que tenemos y como resultado Dios nos dará más. La práctica hace al maestro. El ministerio que tenemos siempre puede crecer y madurar más, es cuestión de trabajarlo y ponerlo a práctica.

Pregunta para considerar: ¿Cómo puedo hacer mejor uso de lo que Dios me ha dado?

Mi opinión: La verdad es que debo de poner en práctica las cosas que creo que Dios me ha dado para ir comprobando. Creo que he estado esperando a que Dios me diga que hacer, pero tiene sentido que debo de ponerme a trabajar y Dios me irá enseñando donde me desarrollo más.